23 junio 2011

Ese incómodo momento en el que no sabes qué escribir.

Me voy por las ramas el 80% del tiempo, wiii~






No puedo creerlo ¡No puedo creerlo! ¿Segura que no estoy soñando?
Damas, caballeros y criaturas fantásticas...
¡KyokoD está dejando una entrada en el blog!
¡Es en serio!

Tan bella mi S.C., dejándome la presentación (y recordándome que soy una vaga por no haber posteado nada en el blog desde hace... yo qué sé, dos meses. Un mes y medio. Un mes. Un lapso de tiempo). Pues sí, mai dir a biuriful pipol, estoy de vuelta... por ahora. Venga, que ni yo misma me lo creo. De hecho, cabe la posiblidad de que deje el post sin terminar, me vaya y S.C. se quede así como "TT_TT estuvo tan cerca. Taaan cerca..."

S.C: No saldrás de aquí hasta que termines la entrada... *cierra la puerta con llave*

... Bueeeeno, creo que no me queda de otra... Ahora... De qué hablar. O de qué no hablar. He ahí el dilema. Digamos que siempre se me ocurre algo de lo qué escribir, pero luego cuando abro la ventana del blog me quedo así como "... Wait, no, no sé como poner esto en una entrada" y desisto. Y cuando no es eso, es que me peleo con el editor de Blogger y desisto de mi misión.

En fin, el chiste es que tengo lapsuses (a saber si eso es una palabra) mentales y al final no escribo nada. Pero como S.C. no me va a dejar salir de aquí hasta que por fin deje algo en el blog (si es que en serio, ya casi pareciera que morí y me siguen colocando al final de los post para recordar mi alma), pues tengo que improvisar.

Veamos. Sinceramente, siempre tengo ganas de escribir, es algo así como un vicio o una de esas pocas que puedo hacer sin que me regañen en clases (aunque ya podrían dejarme jugar DS, que Pokémon también puede ser educativo); pero cuando tomo el lápiz y el cuaderno quedo en blanco. Setenta historia sin terminar, setenta millones de personajes (sin contar los de rol), y no se me ocurre absolutamente nada para comenzar, o para desarrollar, o para terminar. Y así me quedo, mirando al cuaderno con cara de póker, para finalmente ponerme a jugar al ahorcado o a la vieja con Emiluz.

Lo mismo que pasa aquí. A lo que abro el Blogger tengo una pequeña idea de lo que voy a escribir y creo que va a ser suficiente para al menos escribir cinco párrafos, pero nada, es una vil mentira porque a lo que escribo la primera palabra el lapsus comienza. Es algo así como cuando voy a buscar algo en Google: vengo, coloco el puntero en la barra de búsqueda, pasa un zancudo, lo mato, y para cuando voy a escribir ya se me fue el hilo y no sé que poner. Total que al final acabo googleando cualquier cosa que se me ocurre, algo así como "Hola" o "How ya doooin'?", y ya cuando me estoy tratando de dormir es que recuerdo que era lo que iba a buscar. Cosas de mi intelecto.

Y perdí otra vez el hilo... En fin. He ahí el porqué no dejo post desde hace tieeeeempo, aunque tengo varias cosas para subir, como la continuación de Like a BOSS (que creo que ya ni está en mi PC) o seguir la historia esa que S.C. y yo estábamos escribiendo... y la que inició este blog, por cierto; pero simplemente no tengo inspiración para seguirlas. Así soy yo de inconstante. Igual y en vacaciones me da el venazo y escribo setenta post, pero bueeeeno.

... Sí, ya sé que no hay muchas esperanzas.

En fin, pueden tomar esto como mi laaarga excusa de porqué nunca escribo. Tengo la ligera sensación de que fui cambiando de tema poco a poco, pero esos son detalles. Siento que ya escribí lo suficiente y que si pongo más el post va a volverse un arroz con mango ahí.



Se despide y les manda besitos y abracitos,

KyokoD (co-bloggeando con S.C. y Limón)

1 comentario:

  1. Yey! ¡Sigues viva! ¡Cancelen el funeral, bloggeros, KyokoD ha vuelto! <3

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